domingo, 24 de agosto de 2014

EMBRIAGADA DE TU AMOR

Deseo amarte como jamás nadie te amo.
Entregarte entero  mi corazón,         
embriagarte con mis besos,
aprisionarte entre mis brazos,
enloquecer con el ardiente fuego de tus
manos sobre mi piel
quemando y reviviendo el alma
como si fuera el ave fénix despojando  mi propia
voluntad.
Tócame, abrázame, bésame hasta que haya  revivido
mil veces más,
 y en cada  gemido ahogarte con esta pasión y deseo
agobiante lleno de éxtasis.
Es así es como deseo amarte cosita mía,
reencontrarte  en cada una de esta vida,
esperar el momento para tenerte de nuevo entre
mis brazos,
oler el perfume de tu piel recién bañado,
con esa naturalidad que solo tú sabes tener,
respirarte hasta tenerte en lo más profundo de mis
pulmones
que  lo único que se pueda percibir sea eso,
tu esencia, tu humor, saciarme,
y después de llenarme  podré vivir de nuevo. 
Hombre de mi vida, mi amor soñado, mi dulce
Papacito deseado.
Si piensas que ya no puedes más,
mójame con todos tus recuerdos  y no dejes de llorar.
Grita desde adentro todo el amor que me
arrastra a ti.
Enrédate en mi cuerpo, atrévete a volar.
Pero no te sueltes ni me dejes ir.
Abrázate a mi cintura,
abrázate a la ilusión como un ser que ha perdido
la memoria.
Eres el hombre que siempre soñé  viviendo  en un sueño
que es más bello que la realidad
en esta tierra donde la belleza eres tú.
Autora. Rosalía. R.R.





No hay comentarios.:

Publicar un comentario