callando mi voz en el silencio.
Miedo a quererte tanto como tu
a mi…
Suspiro, lloro y amo lo que siento.
No esperes más.
Ven y despoja de tu vida todo aquello
que impida explorar tu carne trémula
pura y clara como agua en manantial.
Ven sacia y calma tu sed.
Tómame una y otra vez antes que amanezca.
Aún es temprano y tengo la carne fresca
Y la piel de seda.
Devora mi entraña poco a poco a poco y
llename de caricias prohibidas ,
domina mis sentidos,
susurrando al oído te amo.
Tómame violentamente y háblame de tus
deseos, locura y cada centímetro que
deseas consumir.
Si el olvido lleva implícito tú querido nombre
en mis recuerdo.
Con el silencio como código cautivo,
Quemare mis labios sin decir adiós.
Y si no me amas, clávame la daga de la
Indiferencia.
Porque amar sin ser amado, es como
agonizar lentamente en soledad.
Autora. Rosalía. R.R.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario